Una causa en jóvenes de trastornos depresivos.

 
Hay diferentes causas que pueden conducir a la depresión. Cuando nos encontramos con jóvenes con depresión nos parte el alma. Sin embargo es más frecuente de lo que pensamos. Recientemente ha sido descubierta una causa de trastornos depresivos en jóvenes por un equipo del departamento de psiquiatría de la Universidad de Illinois.
Según el informe de las conclusiones, los jóvenes que caen en estado de depresión, el estudio se ha hecho con personas de edades comprendidas entre los 18 y los 23 años, presentan un exceso de hiperconectividad cerebral, o dicho de otra manera, los cerebros de los jóvenes que sufren depresión tienen un exceso de conexiones.
Este exceso de conexiones provoca rumiación. Rumiación, en pocas palabras, es dar vueltas una y otra vez a ideas negativas, es decir, “comerse el coco”. La rumiación, a su vez, es la causante de la depresión entre los jóvenes que sufren exceso de conexiones cerebrales. Según el mismo estudio, en estos casos, los jóvenes afectados tienen una altísima posibilidad de recaer en una depresión en un plazo máximo de dos años si no se toman las medidas adecuadas.
Este problema tiene una respuesta psicológica. Como hemos dicho, la depresión se produce en tres pasos: la hiperconectividad lleva a la rumiación y la rumiación provoca depresión. Está claro que la solución es eliminar uno de los dos primeros pasos. Pues bien: la hiperconectividad no tiene hoy por hoy remedio, pero ese exceso de conexiones cerebrales no es en sí mismo quien provoca la depresión.
La solución, pues, está en eliminar el segundo paso, es decir, la rumiación, y ello es relativamente fácil con una terapia adecuada. Los psicólogos tratamos constantemente casos de rumiación con éxito.
Por ello, en casos de jóvenes en estado de depresión, será necesario verificar mediante un escáner cerebral si el paciente sufre un exceso de conectividad cerebral, y si se da ese diagnóstico, pasar a tratar cuanto antes la rumiación, con lo que no sólo se resolverá el problema, sino que se evitarán recaídas. La rumiación no sólo puede provocar depresión, sino que puede ser causa de sentimientos de frustración que provocan estados de ansiedad. Por tanto, eliminando la rumiación la calidad de vida del joven aumentará considerablemente, hasta el punto de poder hacer una vida absolutamente normal.
Este nuevo descubrimiento prueba una vez más que cuando la medicina y la psicología van de la mano y se complementan, los avances son considerables y las soluciones, eficaces. Ése es el camino.